Hoy no es un día más.
Hoy no es solo un feriado.
Hoy es un recordatorio.
Un recordatorio de que el trabajo dignifica.
Un recordatorio de que hay millones de personas que se levantan cada día a poner el cuerpo, la cabeza y muchas veces el alma… para que otros digan simplemente: “esto funciona”.
En las PYMES sabemos bien lo que es eso.
Sabemos lo que es quedarse hasta tarde, poner el auto para repartir un pedido, renunciar a un fin de semana para cerrar una venta o hacer de gerente, administrativo y cadete a la vez.
Sabemos lo que es empujar sin horarios, con una mezcla de pasión, necesidad, compromiso… y sí, a veces resignación.
Pero también es cierto que trabajar no debería doler.
No debería robarte la vida, ni apagar tu entusiasmo, ni dejarte con la sensación de que das mucho y recibís poco.
Y ahí es donde hay que poner el foco:
En hacer del trabajo un acto de construcción, no de desgaste.
En trabajar con sentido, no solo con esfuerzo.
En liderar con empatía, no con presión.
En entender que un buen trabajador no es quien más horas mete, sino quien mejor resultado genera y más aprende en el proceso.
Muchos empresarios también son trabajadores. A veces, los más solos y los más agotados.
Y muchos colaboradores sienten que dan todo, pero nadie los ve realmente.
Por eso, este día no es solo de los operarios, ni solo de los empleados, ni solo de los sindicatos.
Es de todos los que sostienen empresas con su hacer diario, sin importar el título que tengan en la puerta o en la firma del mail.
Este 1º de Mayo, desde Grandes Pymes, queremos decirte algo simple:
Trabajar vale la pena, si también te permite vivir.
Reconocer al otro vale más que cualquier bonus.
A todos los que trabajan con compromiso, a los que no bajan los brazos aunque no haya aplausos, a los que piensan cómo mejorar y no solo cómo cobrar,a los que hacen de la PYME un lugar donde sí se puede…
Gracias.
Feliz Día del Trabajador.
Nos debemos respeto, y también calidad de vida.