por Ricard Lloria
Adaptación en la Nueva Era de Inteligencia Artificial y Automatización en las Organizaciones. Quizás ya sea nuestra hora de adaptarnos a un futuro automatizado junto a la inteligencia artificial dentro de las organizaciones y empresas.
El tsunami de la innovación tecnológica seguirá cambiando profundamente cómo vivimos y trabajamos, y cómo operan nuestras sociedades, organizaciones y empresas. En lo que ahora se llama la Cuarta Revolución Industrial, ya podemos ver como convergen y convergerán tecnologías que vienen de años atrás, como la robótica, la nanotecnología, la realidad virtual, la impresión 3D, el Internet de las Cosas (IOT), la inteligencia artificial (AI o IA) y la biología avanzada. Y a medida que estas tecnologías sigan siendo desarrolladas y ampliamente adoptadas, producirán cambios radicales en todas las disciplinas, industrias y economías, en la forma en que los individuos, las empresas y las sociedades producen, distribuyen, consumen y disponen de bienes y servicios.
“La libertad supone responsabilidad, por eso la mayor parte de los hombres le teme tanto”. George Bernard Shaw
Estos acontecimientos han dado lugar a preguntas sobre qué papel jugarán los seres humanos en un mundo impulsado por la tecnología. Un estudio, realizado ya hace una década atrás, de la Universidad de Oxford de 2013 “The Future of Employment: How susceptible are jobs to computerisation?(PDF)“ estimaba que cerca de la mitad de todos los empleos en Estados Unidos podrían perderse a la automatización en las próximas dos décadas. Por otro lado, economistas como James Bessen, de la Universidad de Boston, en su artículo del mismo año, 2013, “How Computer Automation Affects Occupations: Technology, Jobs, and Skills“ argumentaba que la automatización a menudo va de la mano con la creación de nuevos empleos. Por lo tanto, ¿cuáles son los nuevos puestos de trabajo o el desempleo estructural masivo?
En este punto, podemos estar seguros de que la Cuarta Revolución Industrial tendrá y está teniendo un impacto disruptivo en el empleo, pero nadie todavía puede predecir la escala del cambio. La historia nos dice que el cambio tecnológico afecta con más frecuencia a la naturaleza del trabajo, en lugar de la oportunidad de participar en el trabajo mismo.
La Primera Revolución Industrial trasladó la fabricación británica de los hogares populares a las fábricas, y marcó el comienzo de la organización jerárquica. Este cambio fue a menudo violento, como lo demostraron los famosos disturbios de principios del siglo XIX en Inglaterra. Para encontrar trabajo, la gente se vio obligada a trasladarse de las zonas rurales a los centros industriales, y fue durante este período que surgieron los primeros movimientos laborales.
La Segunda Revolución Industrial marcó el inicio de la electrificación, la producción a gran escala y las nuevas redes de transporte y comunicación, y creó nuevas profesiones como ingeniería, banca y enseñanza. Fue entonces cuando surgieron las clases medias y comenzaron a exigir nuevas políticas sociales y un mayor papel para el gobierno.
Durante la Tercera Revolución Industrial, los modos de producción fueron automatizados aún más por la electrónica y por la tecnología de la información y la comunicación, y muchos empleos humanos pasaron de la industria manufacturera a los servicios. Cuando se introdujeron máquinas automáticas en la década de 1970, inicialmente se asumió que serían un desastre para los trabajadores de la banca minorista. Sin embargo, el número de empleos en sucursales bancarias aumentó con el tiempo a medida que los costos caían, sólo que la naturaleza del trabajo cambió – se volvió menos transaccional y más enfocada en el servicio al cliente.
Todas las revoluciones industriales fueron disruptivas por naturaleza, y la cuarta no dejará de ser diferente. Pero si tenemos en mente las lecciones de la historia, podemos manejar el cambio. Primero, tenemos que centrarnos en las habilidades, y no solo en los trabajos específicos que aparecerán o desaparecerán. Si podemos determinar qué conjuntos de habilidades necesitaremos, podemos educar y capacitar a la fuerza laboral humana para aprovechar todas las nuevas oportunidades que la tecnología crea.
En segundo lugar, la experiencia nos demuestra que las clases desfavorecidas deben ser protegidas; los trabajadores que son vulnerables a ser desplazados por la tecnología deben tener tiempo y medios para adaptarse. Y para asegurar que la Cuarta Revolución Industrial se traduzca en crecimiento económico y frute para todos, podríamos empezar trabajar juntos para crear nuevos ecosistemas regulatorios. Los gobiernos, obviamente, tendrán un papel crucial que desempeñar, pero las empresas y los dirigentes de la sociedad civil también tendrán que colaborar con los gobiernos para determinar las regulaciones y normas apropiadas para las nuevas tecnologías e industrias, como ya hablamos en entradas atrás sobre la regulación de la inteligencia artificial en el marco europeo.
Podríamos dejar de asumir que esto nos será fácil. La política, será quienes dejen que la tecnología, nos vaya determinando el ritmo del cambio, y la implementación de las reformas necesarias, posiblemente nos será un trabajo duro y lento. Nos puede requerir una combinación de políticas orientadas hacia el futuro, marcos normativos ágiles y, sobre todo, asociaciones eficaces a través de las fronteras organizativas y nacionales. Un buen modelo a tener en cuenta es el sistema de «flexiseguridad» de Dinamarca, en el que un mercado laboral flexible se combina con una fuerte red de seguridad social que incluye servicios de formación y recapacitación para todos las personas.
La tecnología puede estar avanzando rápidamente, pero no hará que el tiempo se derrumbe. Los cambios trascendentales y revolucionarios por delante tendrán lugar a lo largo de muchas décadas, no como una gran explosión. Las personas, las empresas y las sociedades tienen tiempo para adaptarnos; pero humildemente creemos que no podemos permitirnos retrasarnos mucho por la elevada velocidad que está creciendo la inteligencia artificial. Crear un futuro en el que todos podamos beneficiarnos para poder comenzar lo antes posible
Sobre la adaptación en la Nueva Era de Inteligencia Artificial y Automatización en las Organizaciones.
Introducción:
La irrupción de la inteligencia artificial (IA) y la automatización en las organizaciones nos está redefiniendo el panorama laboral a un ritmo sin precedentes. Estas tecnologías no solo nos está transformando la naturaleza del trabajo, sino también las estructuras organizativas, los modelos de negocio y la forma en que las empresas interactúan con sus clientes y las personas. La clave para las organizaciones deja de ser solo adoptar estas tecnologías, sino adaptarnos de manera efectiva para maximizar los beneficios y mitigar los desafíos.
En esta humilde entrada intentaremos poder investigar y explora las estrategias clave para la adaptación en la era de la inteligencia artificial y la automatización, analizando cómo las organizaciones pueden reconfigurar las operaciones, formar a las personas y crear un entorno que fomente la innovación y la resiliencia.
1. Reconfiguración de las Operaciones Empresariales
La adopción de la inteligencia artificial y la automatización nos puede requerir una reconfiguración fundamental de las operaciones empresariales. Las organizaciones podrían empezar a rediseñar los procesos para aprovechar al máximo estas tecnologías, lo que implica una transición desde los métodos tradicionales hacia enfoques más ágiles y centrados en los datos.
A. Integración de IA y Automatización en los Procesos Clave
Para podernos adaptar con éxito, las organizaciones podrían empezar por identificar los procesos clave que pueden beneficiarnos de la automatización y la IA. Esto incluye la automatización de tareas repetitivas y de bajo valor agregado, como la entrada de datos o la gestión de inventarios, permitiendo que las personas se concentren en actividades más estratégicas y creativas.
Por ejemplo, la IA la podríamos utilizar para mejorar la cadena de suministro mediante la predicción de la demanda, optimización del inventario y la logística. Esto no solo reduce costos, sino que también mejora la eficiencia operativa, además ganamos en tiempo en la entrada de datos, como podrían ser la entrada y facturación de albaranes de compra.
B. Transformación Digital y Agilidad Organizacional
La transformación digital es un componente crucial para la adaptación. Las empresas pueden convertirse en organizaciones ágiles y capaces de responder rápidamente a los cambios del mercado y las demandas de los clientes. Esto implica la adopción de plataformas digitales, el uso de análisis avanzados y la capacidad de iterar rápidamente sobre productos y servicios.
La agilidad también se refleja en la capacidad de las organizaciones para cambiar de dirección rápidamente, reorganizar equipos y priorizar proyectos según las necesidades emergentes. En este sentido, la IA puede facilitar una mayor flexibilidad, proporcionando a las personas responsables de los datos en tiempo real y análisis predictivos para tomar decisiones más informadas y oportunas.
2. Formación y Capacitación de los Empleados
Uno de los desafíos más significativos en la adaptación a la IA y la automatización es la necesidad de formar y capacitar a los empleados para trabajar en un entorno tecnológicamente avanzado. La IA está redefiniendo las habilidades necesarias para el trabajo, creando una demanda de competencias digitales y cognitivas avanzadas.
A. Reskilling y Upskilling
La adaptación efectiva nos puede requerir inversiones sustanciales en programas de reskilling (recapacitación) y upskilling (mejora de habilidades) para preparar a las personas para roles que impliquen el uso de tecnologías avanzadas. El reskilling se centra en enseñar nuevas habilidades de las personas cuyas funciones están siendo automatizadas, mientras que el upskilling mejora las habilidades existentes para adaptarnos a los nuevos requisitos laborales.
Por ejemplo, las personas que anteriormente realizaban tareas manuales pueden ser capacitados en la gestión de sistemas automatizados o en la interpretación de análisis de datos generados por IA. Este enfoque no solo preserva el empleo, sino que también mejora la capacidad de la empresa para competir en un mercado impulsado por la tecnología.
B. Desarrollo de Competencias Digitales y Humanas
Además de las competencias técnicas, podría ser crucial que podamos desarrollar competencias humanas como la creatividad, la resolución de problemas complejos y la inteligencia emocional, que son difíciles de automatizar. Estas habilidades complementan las capacidades de la IA y nos pueden ser esenciales para roles que nos requieran interacción humana, liderazgo y toma de decisiones estratégicas.
Las organizaciones podrían promover una cultura de aprendizaje continuo, algo que ya hablamos en entradas anteriores, donde las personas tengamos acceso a recursos educativos y oportunidades para mejorar nuestras habilidades. Esto nos puede incluir el uso de plataformas de aprendizaje en línea, programas de mentoría y la creación de comunidades de práctica dentro de la empresa, un ejemplo, que ya hablamos también en su día, una herramienta es la introducción del content curator dentro e las organizaciones, capaz de seleccionar, transmitir lecturas y aprendizajes par tener una plataforma dentro de la empresa dónde la información, informes actuales estén al abasto de todas las personas, o lo que es lo mismo, open learn, aprendizaje abierto.
3. Redefinición de Roles y Responsabilidades
La introducción de la IA y la automatización nos está llevando a una redefinición de los roles y responsabilidades dentro de las organizaciones. Los modelos tradicionales de trabajo nos están siendo reemplazados por enfoques más flexibles y colaborativos, donde las máquinas y los humanos trabajamos en conjunto.
A. Coexistencia Humano-Máquina (Human Machine).
La clave para la adaptación es que podamos crear un entorno en el que las máquinas complementen el trabajo humano en lugar de reemplazarlo. Esto nos puede implicar la redefinición de los roles para aprovechar las fortalezas de ambos. Los humanos, las personas podamos concentrarnos en tareas que requieren creatividad, juicio y empatía, mientras que las máquinas se podrían encargar de tareas que requieren velocidad, precisión y procesamiento de grandes volúmenes de datos.
Por ejemplo, en el campo del servicio al cliente, los chatbots impulsados por IA podemos manejar consultas rutinarias, nos permitirá que podamos centrarnos en resolver problemas más complejos y ofrecer un servicio personalizado.
B. Creación de Nuevos Roles y Modelos de Trabajo
La IA nos está empezando a crear nuevos roles que antes no existían, como científicos de datos, ingenieros de aprendizaje automático y analistas de ética en IA. Las organizaciones podrían empezar a poder estar preparadas para identificar y crear estos nuevos roles, asegurándonos de que están alineados con los objetivos estratégicos, la misión, visión y valores de la empresa.
Además, la adopción de estos modelos de trabajo podría llevarnos a que sean más flexibles, como el trabajo remoto y los equipos distribuidos, podemos ver que se está acelerando con la digitalización. Las empresas podrían empezar a ir adaptándose las estructuras y políticas para apoyar estos modelos, garantizando la productividad y la colaboración, independientemente de la ubicación física de las personas.
4. Fomento de una Cultura de Innovación y Resiliencia
La adaptación a la IA y la automatización nos deja de ser solo una cuestión de tecnología, sino también de cultura organizacional. Las empresas y organizaciones pueden empezar a fomentar una cultura que valore la innovación, la experimentación y la resiliencia.
A. Promoción de la Innovación Abierta
La innovación abierta, que nos puede ayudar a que nos implique la colaboración con socios externos, startups y universidades, también podría sernos crucial para mantenernos a la vanguardia en un entorno tecnológico en constante evolución. Las organizaciones podrían empezar a estar dispuestas a explorar nuevas ideas y tecnologías, adoptando un enfoque experimental que nos permita iterar rápidamente y aprender de los fracasos.
B. Resiliencia Organizacional
La resiliencia es la capacidad de una organización para adaptarnos y recuperarnos de los desafíos. En el contexto de la IA y la automatización, esto nos puede significar el que podamos estar preparados para manejar la disrupción tecnológica y los cambios en el mercado. Las empresas podrían empezar a desarrollar planes de contingencia, diversificar las operaciones y mantener una mentalidad de adaptación continua.
Esto también nos puede implicar estar atentos a los aspectos éticos y sociales de la IA, asegurándonos de que las tecnologías se implementen de manera responsable y en beneficio de todos las personas. La transparencia, la ética y la responsabilidad social podrían empezar a estar en el centro de cualquier estrategia de IA.
5. Gestión del Cambio y Liderazgo en la Era Digital
La transición hacia un entorno de trabajo impulsado por la IA y la automatización nos puede requerir de un liderazgo fuerte y una gestión eficaz del cambio. Los líderes podrían ser visionarios y estar preparados para guiar a las organizaciones a través de esta transformación.
A. Liderazgo Transformacional
El liderazgo transformacional es esencial en este contexto. Los líderes deben ser capaces de inspirar y motivar a las personas de nuestro equipo, comunicando una visión clara del futuro y los beneficios que la IA y la automatización nos pueden traer. Esto implica no solo la adopción de nuevas tecnologías, sino también la transformación de la cultura organizacional para alinearla con los nuevos paradigmas tecnológicos.
B. Comunicación y Gestión del Cambio
La gestión del cambio es fundamental para garantizar una transición suave hacia un entorno de trabajo automatizado. Esto nos puede implicar una comunicación clara y constante sobre los cambios que se nos avecinan, los beneficios esperados y el impacto en las personas. Los líderes podrían empezar a estar disponibles para responder preguntas, abordar preocupaciones y proporcionar el apoyo necesario para que las personas nos podamos adaptar a los nuevos roles.
Además, la gestión del cambio nos podría incluir la participación activa de las personas en el proceso de transformación. Esto se podría lograr si conseguimos que, mediante la creación de grupos de trabajo, encuestas de retroalimentación y la promoción de un diálogo abierto sobre el impacto de la IA y la automatización en el lugar de trabajo.
6. Impacto Social y Ético de la IA y la Automatización
A medida que las organizaciones nos podamos adaptar a la IA y la automatización, podrá que nos sea crucial el que podamos considerar el impacto social y ético de estas tecnologías. La adopción responsable de la IA no solo es importante para la sostenibilidad del negocio, sino también para la sociedad en general.
A. Responsabilidad Social Corporativa y Ética en IA
Las organizaciones podrían empezar a integrar la responsabilidad social y la ética en la estrategia de IA. Esto implica que nos podamos asegurar que las tecnologías se desarrollen e implementen de manera justa, evitando sesgos y discriminación. Además, las empresas pueden empezar a ser transparentes en cómo se utilizan los datos y cómo se toman las decisiones automatizadas.
La ética en IA también se extiende a la toma de decisiones sobre el desplazamiento laboral. Las organizaciones tienen la responsabilidad de apoyar a las personas cuyas funciones están siendo automatizadas, proporcionándoles oportunidades de recapacitación y transición a nuevos roles.
B. Inclusión y Diversidad
La IA y la automatización pueden empezar y tendrían que ser ya inclusivas y reflejar la diversidad de la sociedad. Las organizaciones pueden asegurarse de que los equipos de desarrollo y los conjuntos de datos sean representativos, evitando la perpetuación.
Obviamente, todo este tema, lo podríamos estar explicando con muchos análisis de los informes que hemos podido recopilar en la bibliografía que dejamos siempre en cada entrada, obviamente hablar de la adaptación en la Nueva Era de Inteligencia Artificial y Automatización en las Organizaciones, es un tema que de por si mismo va evolucionando y creciendo, lo que es ahora algo que se puede ir contrastando, de aquí unas semanas, meses o años, seguramente que habrá evolucionado a un nuevo entorno y paradigma, dónde ahora mismo, es desconocido y estamos empezando a conocer con nuestro día a día.
Uso y comprensión de los Informes de la bibliografía
“La ignorancia no es no saber sino no querer saber” – Karl Popper
Estos informes del 2023, 2024 nos pueden proporcionar información actualizada sobre cómo las organizaciones están abordando la adaptación a la inteligencia artificial y la automatización. Podríamos utilizar esta bibliografía para fundamentar investigaciones, informes o estrategias dentro del contexto de la transformación digital en las empresas, organizaciones y en general.
Fuentehttps://ricardlloria.wordpress.com/2024/08/26/adaptacion-en-la-nueva-era-de-inteligencia-artificial-y-automatizacion-en-las-organizaciones/