Por Ana Teresa Rodríguez C.
En este artículo vamos a hablar de hibridación, es decir, de crear nuevos productos o servicios a partir de otros ya disponibles. Veamos algunos apuntes interesantes:
¿Qué es hibridar?
Hibridar es mezclar distintas disciplinas y/o productos para satisfacer necesidades nuevas o existentes. Es conjugar varios puntos de vista, muchas veces totalmente disimiles, para crear una nueva propuesta de valor que se concreta en un producto o servicio innovador.
Zona de confort y empatía
Los especialistas afirman que para innovar debemos abandonar nuestra zona de confort y ponernos en los zapatos del otro. Veamos un ejemplo: Si reunimos a un programador de elite con un diseñador de alta costura, con el fin de diseñar “ropa tecnológica”, cada uno va a pensar que es lo máximo. Pero, qué sucede cuando intercambiamos sus papeles, haciendo que el programador diseñe ropa y utilice la aguja y el diseñador cambie sus tijeras por un lenguaje de programación?. Es ahí cuando puede surgir la “chispa”. Las ideas más estrambóticas pueden nacer y estas pueden ser la semilla para algo nuevo. Además de que cada uno de ellos va a entender las dificultades del otro…
Mayor valor por tu compra
Grandes emprendedores afirman que el secreto de marketing del siglo XXI es ofrecerle a los consumidores promedio lo que solo pueden tener los consumidores con un alto poder adquisitivo, aunque sea por espacios muy breves de tiempo o ajustados a necesidades muy especificas. Para ello, creen que la hibridación es un camino muy válido y nos ofrecen, por ejemplo, hoteles en aeropuertos, con el lujo de una cabina de primera clase y módicos alquileres por hora.
Diferentes maneras de hibridar
Podemos hibridar de diferentes formas y para obtener resultados diversos:
- Conjugar conceptos diferentes
- Combinar productos y servicios
- Obtener resultados cada vez más especializados
- Eliminar limitaciones a nuestros clientes
- Crear modelos ganar-ganar
- Mejorar y/o adaptar los sistemas de distribución
- Aprovechar las tendencias sociales actuales
- Combinar disciplinas disimiles
- Aprovechar excedentes y/o mermar desperdicios
- Aprovechar comentarios y sugerencias de nuestro clientes
La lista puede seguir creciendo, de hecho estoy segura que a Usted, amigo lector, ya se le ocurrieron un para de ideas nuevas. Hablemos sobre estos puntos.
Conjugar conceptos diferentes
Este es una herramienta de larga data en publicidad y que varía con las consideraciones sociales. Tiene que ver con el “tener” y el “disfrutar”, observando hacia qué lado se inclina la balanza. Veamos un ejemplo: las empresas donde el uso y manejo de fotocopiadoras es intensivo, empezaron a valorar de manera seria las ventajas de “tener” un equipo propio y asumir todos los costos de reparaciones, materiales, mantenimiento y obsolescencia, en vez de “disfrutar” de un servicio de alquiler con todos estos puntos incluidos y donde, además, cada año le es cambiado el equipo por uno nuevo. Usted como consumidor decide y como emprendedor también.
Combinar productos con servicios
Cada vez son menos los productos físicos, de corte tecnológico, que se venden sin un “servicio” asociado. Cuando Usted compra una computadora por lo general esta viene acompañada de algún sistema operativo y una serie de “plus” por ser cliente de la marca tal o cual. Lo mismo sucede con los teléfonos móviles, los cuales se han asociado con empresas de software para brindarnos toda una serie de apps dentro del dispositivo. Este ejemplo es extensible a relojes para usos deportivos, ropa de actividades extremas y muchos más.
Obtener resultados cada vez más especializados
Esto se observa, sobre todo, en los mercados sobresaturados de productos, donde la competencia es feroz y si no te destacas simplemente mueres. Sin embargo, en economías más simples también se ven estos ejemplos. Comentemos como hace unos años, en Venezuela, una empresa vistió de fiesta el sabroso casabe y lo empezó a vender empaquetado en cilindros de cartón muy bien hechos y diagramados con exquisito gusto. Al principio era casabe puro, pero después surgió el casabe con ajo y aceite de oliva, con queso, con… Era obvio que no estaban dirigidos solo al mercado local y que su objetivo era fronteras afuera, sin embargo, la hibridación de sabores autóctonos con otros mediterráneos le permitió ofrecer productos novedosos y de mayor alcance.
Eliminar limitaciones a nuestros clientes
Todo consumidor desea que le faciliten el acceso a su producto o servicio preferido. Para ello, nada mejor que mezclar especialidades para lograr el objetivo. Volvamos a los ejemplos: una persona de la tercera edad, a la hora de usar un teléfono celular tiene que superar dos limitaciones básicas, una visión debilitada y un conocimiento escaso de las tecnologías móviles. Para ello, se debieron diseñar teléfonos que cumplieran con los estándares de seguridad requeridos y que además tuvieran los números grandes y fueran fáciles de usar. No puedo olvidar la cara de un señor mayor, en una tienda de celulares, cuando una dependienta, que podía ser fácilmente su nieta, le decía que debía recordar su PIN para desbloquear el aparato y poder llamar. La cara del anciano no necesitaba palabras…
Crear modelos ganar-ganar
Nada ayuda mas al cierre de un negocio como el ver que todas las partes salen ganando. Por ejemplo: el uso de un nuevo método de pago en un negocio. Hace que el cliente se sienta más seguro al no tener que portar efectivo además de ofrecerle más opciones para manejar su presupuesto. Por su lado, el negocio, se ahorra las colas en los bancos, mejora su seguridad y agiliza los periodos de pago de los clientes.
Servicios y productos personalizados
La hibridación nos habla de servicios personalizados, de productos adaptados por completo a nuestros gustos, de más y mejores prestaciones a menor costo. En fin, de mejoras sustanciales. En el siguiente artículo tocaremos puntos que se quedan hoy en el tintero…
Fuente: https://www.rodriguezc.com/10-formulas-crear-nuevos-productos-la-hibridacion/