Hay un proverbio chino que es un lugar común en el mundo del management: para hacer una travesía de 1.000 millas siempre hay que empezar por dar un paso. Eduardo Becher, uno de los socios directores de BDO, la quinta firma de auditoría del país, lo tuvo en cuenta allá por 1972, cuando se juntó con su hermano para inaugurar una pequeña oficina contable independiente. Treinta años después, Becher tiene a su cargo una estructura de 246 personas, que presta asesoramiento contable, económico, financiero y de management a empresas como Unilever, Edesur, Loma Negra o Mercedez-Benz.
Hay un proverbio chino que es un lugar común en el mundo del management: para hacer una travesía de 1.000 millas siempre hay que empezar por dar un paso. Eduardo Becher, uno de los socios directores de BDO, la quinta firma de auditoría del país, lo tuvo en cuenta allá por 1972, cuando se juntó con su hermano para inaugurar una pequeña oficina contable independiente. Treinta años después, Becher tiene a su cargo una estructura de 246 personas, que presta asesoramiento contable, económico, financiero y de management a empresas como Unilever, Edesur, Loma Negra o Mercedez-Benz.