Por: Thomas J. Delong y Sara DelongLOS EMPLEADOS DE DESEMPEÑO ESTELAR FRECUENTEMENTE SOCAVAN SU LIDERAZGO POR TEMOR A MOSTRAR SUS LIMITACIONES. SI USTED ES UNO DE ELLOS, TÓMESE LAS COSAS CON CALMA Y LEA ESTAS RECOMENDACIONES QUE PUEDEN AYUDARLO A MANTENER SU EXCELENCIA.
¿Por qué tantos profesionales inteligentes y ambiciosos son menos productivos y se sienten menos satisfechos de lo que deberían o podrían ser? ¿Por qué tantos de ellos encuentran que sus trayectorias en ascenso terminan estancándose?
Según nuestra experiencia, los empleados de desempeño estelar a menudo permiten que la ansiedad afecte su progreso. Debido a que están acostumbrados a que las cosas les resulten fácilmente, tienden a evitar las tareas que realmente los ponen a prueba y que requieren el aprendizaje de nuevas habilidades.
Muchos empleados estelares prefieren hacer las cosas equivocadas pero bien hechas antes que hacer deficientemente aquello que sí hay que hacer. Y cuando se encuentran abrumados por un trabajo, generalmente no están dispuestos a reconocerlo, incluso ante ellos mismos, y se rehúsan a pedir el apoyo que necesitan.
Ted, un ejecutivo de ventas altamente exitoso, logró un desempeño sobresaliente en grandes negocios que se convirtieron en un motor de ingresos para su compañía. Después de años de elogios y cuantiosas comisiones, Ted empezó a darse cuenta de que algo andaba mal.
La compañía se había expandido en otra dirección. Si bien la gran mayoría de los ingresos aún provenía de los productos antiguos, todos los esfuerzos y la innovación estaban enfocados en las ofertas de suscripciones.
Inicialmente, Ted desdeñó este nuevo modelo ya que se trataba de pequeñas transacciones en altos volúmenes. Sin embargo, pronto empezó a darse cuenta de que sus días estaban contados: se encontraba cada vez más marginado en la compañía y también en el sector.
Pero estaba paralizado por el temor y las dudas acerca de sí mismo. Su identidad profesional y su autoestima estaban amarradas a su éxito como vendedor.
Los líderes de las organizaciones tienen algo de culpa en la generación de esta mentalidad. No les gusta enterarse de que alguien está enfrentando dificultades ni tampoco se preocupan por recompensar a quien descubrió un nuevo y mejor procedimiento, a pesar de lo mucho que hablan de la importancia de la innovación y de asumir riesgos prudentemente.
Sin embargo, es posible romper este círculo vicioso y actuar de una manera que ayude a su crecimiento profesional. Primero, debe mirarse con franqueza e identificar las fuerzas que aumentan su ansiedad y lo obligan a comportarse de manera no productiva para aliviar ese sentimiento.
Después, debe adoptar prácticas contraintuitivas que le den el valor para salir de su terreno conocido. Esto no pasará de un día para otro. Requiere reconocer la propia vulnerabilidad, algo que a los profesionales estelares no les gusta hacer y que se opone a su obsesión por controlar su imagen a toda costa.
Para lograr un éxito continuo, debe abrirse a nuevas experiencias de aprendizaje que, en el mejor de los casos, lo harán sentirse inseguro e incompetente. Solo debe recordar que esos sentimientos son temporales y que suelen ser el preludio de una mayor capacidad profesional.
DEJE ATRÁS EL PASADO
No hay dudas de que ha tenido experiencias negativas cuando ha asumido algún desafío nuevo. La investigación demuestra, y nuestra experiencia lo comprueba, que la mayoría de nosotros tiende a hacer comparaciones irracionales entre una experiencia negativa del pasado y una situación actual. Pero los recuerdos dolorosos no deberían seguir siendo un obstáculo para el cambio.
Un ejercicio que ha tenido éxito entre nuestros clientes ayuda a distinguir entre la realidad y la percepción respecto de su comportamiento pasado y la forma en que su organización responde a la honestidad y la toma de riesgos.
Piense en una situación en que intentó hacer algo nuevo y se sintió desilusionado con el resultado. ¿Por qué aceptó el proyecto? ¿Por qué le resultó tan difícil? ¿Pidió ayuda? Según lo que sabe ahora, ¿qué hubiese hecho de forma distinta?
Escriba en dos columnas las similitudes y disimilitudes entre un riesgo que está pensando tomar y una experiencia negativa del pasado. Identifique las diferencias claves que facilitarán su progreso.
O piense en un riesgo que asumió y que resultó mal y reescriba la historia desde la perspectiva de otra persona.
Es difícil exorcizar a los demonios del pasado hasta que los mira fríamente desde múltiples puntos de vista. Casi todos en algún momento tenemos sentimientos abrumadores de ineptitud. Nuestros desastres personales son insignificantes en comparación con lo que les pasa a otras personas.
RED DE APOYO
Los empleados de desempeño estelar son, como regla, muy independientes y no les gusta pensar que necesitan mucha ayuda. Incluso aquellos que han tenido la suerte de tener buenos mentores piensan que se los asignaron por sus grandes contribuciones a la empresa.
A medida que van ascendiendo y se convierten ellos mismos en mentores, es común que se rehúsen cada vez más a confesar que se sienten atemorizados, confundidos o incompetentes. Lo que empeora todo es que confían en personas que les dicen lo que quieren escuchar y no lo que necesitan escuchar.
Muchos empleados de desempeño estelar evitan escuchar las opiniones de otros cuando temen que su trabajo no está a la altura. Ese tipo de comportamiento es autodestructivo.
Desafíese a desarrollar una red de apoyo y después pida regularmente a otras personas que le den un ‘feed-back’ honesto, aun cuando el proceso pueda ser doloroso. Pida a personas clave que le ayuden preguntándoles lo que debería dejar de hacer, lo que tendría que seguir haciendo y lo que debería empezar a hacer.
MUÉSTRESE VULNERABLE
Ensaye cómo reconocer su incertidumbre o confesar sus errores con personas cercanas o cómo reconocer sus dudas respecto de proyectos que no son centrales para su identidad profesional. Reconozca sus pequeños fracasos pero sin dar una letanía de circunstancias atenuantes.
Considere el ejemplo de Anne, una ejecutiva que le solicitó a un analista que le explicara un enfoque sofisticado de modelamiento para mejorar los pronósticos en su compañía.
Aunque a Anne no le gustaba mucho la idea de reconocer que no entendía bien la presentación, se tragó su orgullo e interrumpió al analista: “Discúlpame, esto no es cómodo para mí, ¿sería posible que me explicaras los términos y que avanzaras más lento?”. El analista empezó a comunicarse con mayor claridad. La reunión se tornó mucho más colaborativa y ambos terminaron la reunión con una mejor comprensión de los desafíos que enfrentaba la compañía.
A menudo, no reconocer una vulnerabilidad puede tener consecuencias fatales.
Es posible que la reciente crisis financiera se exacerbara porque algunos líderes tenían demasiada vergüenza para reconocer que no comprendían los productos financieros que estaban vendiendo.
Las cosas podrían haber tomado un curso distinto si alguien hubiese tenido el coraje de decir: “No entiendo esto, ¿podrías explicar nuevamente el producto que has creado?”.
Otra forma de poner en práctica la vulnerabilidad es colocarse deliberadamente en situaciones en que literalmente no sabe nada. Matricúlese en clases de un idioma que no tiene relación con usted o su familia. Únase a un grupo de lectura en que no pueda controlar los libros elegidos y oblíguese a dar su opinión en todas las reuniones.
Lo más probable es que sus colegas y conocidos también sean personas de desempeño estelar y que tampoco compartan sus preocupaciones. Al ser valiente y tomar la decisión de mostrarse vulnerable, envía un mensaje poderoso a quienes lo rodean, invitándolos a hacer lo mismo.
Enfóquese en el largo plazo
Las metas importantes pueden soportar percances pasajeros. Cuando observa el panorama global, a menudo se permite más espacio para cometer algunos errores.
Los éxitos en el largo plazo requieren de una disposición a comprometerse con los riesgos necesarios de corto plazo. Los empleados de desempeño estelar a menudo permiten que sus temores les impidan tomar esas oportunidades.
Eso pasó con Rick, un docente muy respetado pero un pésimo jugador de equipo. Su incapacidad de ver el panorama global hizo que su contrato no fuera renovado.
Hacer lo correcto de forma mediocre es doloroso para los empleados de de-sempeño estelar. Es mucho más satisfactorio hacer algo bien incluso cuando no está aprovechando su tiempo de la mejor manera.
Lograr que su desempeño estelar llegue a otro nivel requiere humildad, práctica y paciencia. Pero es un paso necesario en el camino hacia hacer bien aquello que hay que hacer.
Fuente http://www.bestrong-bcr.com/2011/11/la-paradoja-de-la-excelencia.html
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