𝗥𝗲𝘀𝗼𝗹𝘃𝗲𝗿 𝘀𝗶𝗻 𝗿𝗼𝗺𝗽𝗲𝗿: 𝗲𝗹 𝗮𝗿𝘁𝗲 𝗱𝗲 𝘀𝗼𝗹𝘂𝗰𝗶𝗼𝗻𝗮𝗿 𝗰𝗼𝗻𝗳𝗹𝗶𝗰𝘁𝗼𝘀 𝗲𝗻 𝗹𝗮 𝗲𝗺𝗽𝗿𝗲𝘀𝗮 𝗳𝗮𝗺𝗶𝗹𝗶𝗮𝗿

Por Mario Rizo

Existe una manera de abordar cualquier problema, por complejo que sea, sin causar rupturas innecesarias, especialmente en una empresa familiar.

Las consultoras Anne Morriss y Frances Frei saben cómo resolver problemas (Uber puede dar fe de ello), y su método, titulado “Los 5 pasos para resolver cualquier problema en el trabajo”, ha ganado notoriedad por su enfoque práctico. Este sistema, que también aplican a conflictos entre amigos o familiares, resulta especialmente útil para las empresas familiares.

Una de las claves de su éxito radica en que no pretende ser un truco de magia. Al contrario, ofrece un conjunto de etapas que ayudan a entender la naturaleza del problema y abordarlo de manera eficaz. En contraste con frases célebres de los círculos de los grandes directores generales como Zuckerberg o Musk —quienes proclaman “Muévete rápido y rompe algunas cosas”—, el método de Morriss y Frei subraya que el verdadero liderazgo radica en resolver problemas de forma rápida y con el menor daño posible.

Los 5 pasos para resolver cualquier problema

1. Identificar el verdadero problema

Este primer paso invita a analizar la situación desde un ángulo distinto. En lugar de decir “El departamento de ventas no alcanza los objetivos”, la pregunta podría ser: “¿Por qué nuestros clientes no están comprando lo suficiente?” o “¿Qué falla en nuestra estrategia?”. Este análisis requiere escuchar a todos los involucrados para entender las causas subyacentes, y evitar que el problema sea visto como una falla de un solo departamento o individuo, sino como algo que afecta a toda la empresa.

2. Usar la confianza para diseñar la solución

La confianza entre equipos y líderes es fundamental para construir una solución sólida. ¿El problema de ventas fue causado por la idea de una sola persona o por no considerar los obstáculos relevantes? Admitir estos errores es parte de la solución. Aunque el plan no será perfecto de inmediato, está bien, ya que se irá refinando en los siguientes pasos.

3. Buscar opiniones externas

Salir de la zona de confort es esencial. Consultar a personas externas o ajenas al problema puede brindar nuevas perspectivas. Escuchar opiniones de quienes no forman parte del círculo habitual, ya sea por su contexto profesional o su visión de negocios, enriquecerá el plan de acción.

“Los líderes más efectivos no solo resuelven problemas rápidamente, sino con el menor daño posible.”

4. Contar una historia convincente

Crear una narrativa que abarque el pasado, presente y futuro del proyecto es clave. Esto no solo facilita que otros entiendan la lógica detrás de la nueva estrategia, sino que también permite ver si las acciones pasadas han sido coherentes con los objetivos a largo plazo.

5. Actuar de inmediato

Una vez que el plan ha sido perfeccionado, es crucial implementarlo lo antes posible. Si bien algunos problemas tomarán tiempo en resolverse, la rapidez en la ejecución minimiza el riesgo de mayores complicaciones, pues se actúa con base en un entendimiento profundo de la situación.

Estos cinco pasos no solo son prácticos para las empresas, sino para resolver conflictos en general. Sin embargo, en el ámbito empresarial, es importante recordar que el liderazgo no se trata únicamente de quien está en la cima, sino de crear una cultura organizacional basada en la confianza, el trabajo en equipo y la solución eficiente de problemas. En una empresa familiar, esta premisa es aún más relevante para asegurar su continuidad y armonía. “El liderazgo no consiste en ser el mejor, sino en hacer que los demás lo sean.” Simon Sinek

Fuente: https://forbes.com.mx/resolver-sin-romper-el-arte-de-solucionar-conflictos-en-la-empresa-familiar/