El rol de líder autoritario cada vez se lleva menos, ahora la clave está en conseguir que tu equipo colabore en un plano de igualdad. Descubre cómo ser un líder positivo.
El liderazgo positivo cada cobra más fuerza y los típicos jefes autoritarios van cayendo poco a poco en el olvido. Se trata de una tendencia que surge al identificar la necesidad de que los trabajadores colaboren y se involucren, en vez de seguir reglas sistemáticamente.
Las empresas cada vez buscan más a líderes capaces de coordinar y motivar a su equipo con la función es dirigir, no mandar
Un buen líder es aquel que cuenta con una combinación de aptitudes profesionales y características personales por los que puede ser una fuente de inspiración para sus trabajadores, capaz de crear un verdadero impacto.
Por ello, es importante dejar de lado la actitud autoritaria, y adoptar las habilidades para ser un líder positivo:
La escucha empática
Un estudio que involucró a más de 300 empresas pertenecientes a 20 industrias, y repartidas por 18 países, determinó que habilidad comunicativa de los líderes mejoraba más el desempeño del equipo. Resultó ser la capacidad de escuchar a los trabajadores y responder empáticamente.
Tim Cook revela sus dos claves para ser un buen líder
Carl Rogers, psicólogo y autor del libro ‘On Becoming a Person’, describió dicha aptitud calificándola de la manera más eficaz de comunicarse. “La verdadera comunicación tiene lugar cuando escuchamos y entendemos”, cita en su obra.
Así, la clave está en comprender la idea desde el punto de vista del que la propone.
Gestos corporales
Para ser un buen líder has de bajar del estrado que te separa de tu equipo. Los gestos corporales cercanos son importantes para crear una buena relación empresarial.
Los gestos positivos implican sonreír, mantener el contacto visual, y posturas relajadas, evitando cruzar las piernas o brazos. Lo más recomendable es apoyar las manos en la mesa, no mantener los brazos pegados al cuerpo. Así, siempre es aconsejable sentarse directamente frente a la persona a la que te dirijas.
Sin embargo, la clave principal es prestar atención y demostrarles que te interesa lo que están diciendo.
Emociones positivas
Los seres humanos reaccionamos ante las emociones, y por norma general son muy contagiosas. Por el mero hecho de estar en el trabajo no nos volvemos personas completamente racionales y lógicas, por lo que las sensaciones continúan afectándonos.
Las emociones negativas, como el estrés, la preocupación y el miedo reducen notablemente la energía física y mental; por lo contrario, las vibraciones positivas, como el optimismo, entusiasmo y gratitud favorecen el aprendizaje y la motivación, logrando un mejor progreso.
Fuente: https://www.ticbeat.com/empresa-b2b/liderazgo-positivo-aprende-a-dirigir-tu-equipo-sin-ser-autoritario/