Normalmente lo que más miedo nos da hacer es lo que más necesitamos hacer. Las acciones importantes en la vida nunca son cómodas. Para triunfar, hay que practicar el ‘arte de la incomodidad’ porque existe siempre una tendencia natural en el ser humano a hacer lo más cómodo y fácil.
T. Harv Ecker, uno de los personajes incluidos en Aprendiendo de los mejores (Alienta, 9ª edición), dice:
«¡La comodidad mata! Si tu objetivo en la vida es estar cómodo, te garantizo dos cosas: primero, jamás serás rico; segundo, jamás serás feliz. La felicidad no proviene de vivir una vida cómoda preguntándote que podía haber sido. La felicidad viene como consecuencia de vivir de acuerdo a nuestro máximo potencial»
2. Cambia el recorrido de vuelta a casa, ya sea andando o en coche.
3. Acude a eventos donde no conozcas a nadie.
4. Apúntate a alguna actividad totalmente desconocida para ti: baile, chino, cocina, teatro.
5. Varía de hotel y de modo de transporte cuando viajes. No repitas siempre.
6. Cambia los restaurantes a los que acudes habitualmente.
7. Prueba otro tipo de comidas: tailandesa, turca, china, italiana.
8. Acude a sitios frecuentados por personas diferentes a tu estilo de vida: bohemios, directivos, rockeros, pijos, jóvenes.
9. Provoca encuentros con personas de otras culturas: anglosajonas, asiáticas o latinas, por ejemplo.
10. Practica la queja cuando corresponda, no te calles para eludir el conflicto, ya sea en un restaurante, en un hotel, en una tienda de ropa: ¿comida fría? ¿retrasos en las entregas?.
11. Viaja todo lo que puedas, y a poder ser, a países de contraste cultural.
12. Realiza cosas que no domines como experto –¿hablar inglés?– para exponerte al ridículo de manera natural.
13. Provoca conversaciones sobre temas polémicos –política, sexo, religión– para defender tu postura sin arrugarte ni ceder (pero siempre con educación y respeto).
14. Habla en público siempre que puedas.
15. Ponte en primera fila siempre que vayas a un evento (verás que siempre están vacías esas butacas).
16. Cómete la última loncha de jamón del plato o el último pastel de la bandeja (sin remordimientos).
17. Empieza a aguantar las miradas… sobre todo con personas de autoridad, desconocidos o del sexo que te guste.
18. En lugar de que sean los demás los que propongan, sé tú el que proponga dónde comer, cenar, qué película ir a ver o a qué lugar ir de viaje.
19. A la hora de vestir, busca que alguna de tus prendas sean algo más llamativas, en colores, formas o lo que sea. Que se fijen en ti cuando te vean.
20. De vez cuando di ‘NO’: no a propuestas, no a salidas, no a planes…
Y una de regalo:
de conversaciones incómodas que está dispuesto a mantener»